Conocido también como masaje Ky Nye, el masaje tántrico tibetano es una técnica de lo más extendida y que cada vez gana más adeptos gracias a los beneficios de sanación que aporta en comparación con otras prácticas. ¿Quieres conocerlo todo sobre este ritual espiritual sanatorio y lleno de sensualidad? Te desvelamos todos los secretos en este nuevo artículo.
¿Qué es el masaje tibetano Ku Nye?
El masaje tántrico tibetano es una práctica que pretende revitalizar el cuerpo y la mente a través de la estimulación de diferentes puntos del cuerpo vitales para dicha finalidad. Mediante esta práctica, se potencia la energía sexual intentando expandirla por todo el cuerpo. De hecho, según marca la tradición hindú, este masaje permite crecer a nivel personal mediante la experimentación y canalización de placer, más allá de lo meramente sensual. En otras palabras, se considera que el crecimiento espiritual y el placer físico van ligados de la mano, liberando canales energéticos ante posibles bloqueos de energía vital.
En este masaje la búsqueda de placer no recae en la penetración, sino en la fusión de energías entre masajista y cliente, donde se trabaja con los órganos sexuales para alcanzar el placer absoluto y llegar a un orgasmo mucho más intenso.
Beneficios del masaje tibetano
Como hemos comentado, la práctica de este masaje está cada vez más en auge debido a los beneficios que aporta a quien se somete a la misma, destacando los que siguen a continuación:
- Revitalización del cuerpo y la mente
- Abre, desbloquea y alinea nuestros chakras
- Mejora la circulación sanguínea
- Estado de relajación y disminución del estrés y la fatiga
- Alivio de contracturas o dolores articulares y musculares
- Mejora la flexibilidad
- Resuelve problemas digestivos
- Contribuye a eliminar el insomnio y otras patologías como la depresión o disfunciones del sistema nervioso central
Como es lógico, las propiedades de este masaje van mucho más allá y también proporcionan al paciente numerosos beneficios a nivel sexual:
- Potencia el líbido sexual
- Mejora la eficacia y la calidad de las erecciones
- Potencia las secreciones vaginales
- Ayuda a controlar y retrasar la eyaculación
- Reactiva la circulación sanguínea de la zona genital para aumentar el placer
Cómo se realiza el Ku Nye
Para que la práctica de este tipo de masaje tántrico aporte todos los beneficios mencionados anteriormente, debe ser llevada a cabo por un profesional. Lo más importante es que se realice mediante movimientos suaves, lentos y profundos, combinando el placer con la efectividad. De hecho, la cabeza y la espalda son dos de los puntos donde se concentran los puntos terapéuticos principales asociados a la energía del Lung, o del viento, un tipo de energía que se asocia a un estado de calma mental. A la hora de realizar este masaje, es necesario realizar pequeños estiramientos y diferentes tipos de fricciones, con la ayuda de aceites corporales que faciliten el movimiento y el placer, abriendo así todos los sentidos.
Sin duda alguna, un buen masaje Ky Nye debe permitir al paciente experimentar sensaciones que parezcan de otro mundo, por lo que la relajación extrema, la técnica aplicada y la ambientación serán puntos claves para conseguirlo. Consigue canalizar las energías de tu cuerpo y vive una experiencia sin igual que te sanará a nivel físico, mental y emocional gracias al Ky Nye y otros masajes eróticos en Santai que se valen de las enseñanzas tibetanas para alcanzar el máximo placer.